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Luis Nery tiene que considerar subir de categoría, el boxeador mexicano subió a la bascula con mucho sobrepeso para la revancha del jueves con el japones Shinsuke Yamanaka, que tiene lugar en Tokio, Japón.
Nery entró por primera vez en la báscula y marco 123 libras, cinco libras más que el peso gallo de 118 libras. Después de dos horas de sudar para llegar al límite de la división, regresó y pesó 121 libras, para así ser despojado del título.
Yamanaka paro la bascula en 117.5 libras.
Si Yamanaka gana la pelea, entonces será declarado nuevo campeón mundial. Si pierde o pelean por un empate, entonces la corona del WBC estará vacante.
Después de un reinado de cinco años y 12 defensas exitosas, Yamanaka (27-1-2, 19 KO) fue noqueado en cuatro asaltos por Nery quien venció al entonces campeón de 35 años en agosto de 2017 en una hazaña mexicana que asombro a todo el mundo.
Debido a que la sustancia prohibida se encuentra a menudo en carne contaminada en México, el WBC de manera “permisiva”, lo dejo conservar el título mundial con la condición de que pelee contra Yamanaka.
El ídolo japonés se había retirado del boxeo después de su derrota ante Nery, pero cambió de opinión luego de tener la oportunidad de recuperar el cinturón, y también debido al resultado positivo de la prueba de drogas.
“Lucharé con mi corazón, por mi familia, por mi país, por honor, no puedo resignarme a ver mi cinturón del otro lado de la mesa con el mexicano, el jueves lo recuperaré”, expresó Yamanaka.
Mientras que Nery (25-0, 19 KO) prometió lograr otra victoria por KO para borrar cualquier duda del primer combate.
“Estoy mejor preparado, con más motivación, el único plan que tengo es noquear nuevamente a Yamanaka”, menciono Nery.
Aunque la pelea estuvo a punto de terminar en el tercer episodio, solo nueve rounds bastaron para que la revancha terminara y Uzcategui se coronara con Campeón Mundial Interino de la Federación Internacional de Boxeo 168 lbs.
